Instalar una cabeza de hacha

Aunque en nuestra tienda vendemos muchos hachas listos para usar, también es posible hacer tu propio hacha comprando una cabeza de hacha y un mango por separado. También puede suceder que tu mango de hacha necesite ser reemplazado en algún momento. Es importante instalar la cabeza del hacha de manera segura. ¡Asegúrate siempre de llevar el equipo de seguridad adecuado!

-destornillador

-sierra

-cincel

-pegamento para madera

-martillo (de goma)

-papel de lija o lima para madera

Paso 1:

Coloca la cabeza del hacha en el mango y observa hasta dónde puede llegar en el mango. El mango debe sobresalir unos centímetros por encima de la parte superior de la cabeza del hacha . Si el mango es demasiado grueso para pasar por el ojo de la cabeza, alinea la cabeza del hacha en el lateral del mango. Asegúrate de que el mango sobresalga unos centímetros y marca con un lápiz dónde debe estar la parte inferior de la cabeza del hacha. Usa papel de lija o una lima de madera para darle nueva forma al mango. Verifica regularmente el progreso ajustando la cabeza del hacha al mango hasta que se deslice a la posición marcada. Ten cuidado de no lijar demasiado el mango, de lo contrario, la cabeza del hacha no se mantendrá en el mango.

Paso 2:

Usa un cincel o una sierra para hacer un filo en la parte superior del mango. Debe ser lo suficientemente profundo para que la cuña de madera entre lo suficiente, asegurando que la cabeza quede bien sujeta.

Paso 3:

Aplica un poco de pegamento para madera en la cuña y colócala en el mango. Usa el martillo para asegurarte de que la cuña quede firmemente en su lugar. Deja secar el pegamento al menos 15 minutos.

Paso 4:

Usa una sierra para cortar la parte del mango que sobresale de la parte superior del hacha. Deja aproximadamente 1 a 2 cm de madera sobre la cabeza del hacha. Lija el pequeño trozo de madera que queda a la forma deseada.

Paso 5:

Para reforzar aún más el hacha, también puedes fijar una cuña de acero. Hazlo golpeando la cuña de acero con el martillo. Usa el destornillador para golpear la cuña un poco más adentro, de modo que no sobresalga del mango.

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