Descripción del producto
A principios del siglo XIV surgieron capellinas como este con bordes inclinados. Las mejoras en la tecnología del metal hicieron más económico fabricar capellinas de una sola pieza. El borde del capellina se hizo más inclinado, desviando así los proyectiles desde arriba. Esto redujo el impacto en el casco y la cabeza. Este tipo de casco era tan efectivo que incluso los aristócratas lo usaban. El borde ofrecía protección contra golpes descendentes y proyectiles. El casco ofrece un campo de visión perfecto, buena audición y protección óptima.
La circunferencia máxima interior de este capellina es de 68 cm, excluyendo incrustación del yelmo. Este casco está equipado con incrustación y correa de barbilla. Si deseas usar un acolchado adicional, mide tu circunferencia de la cabeza mientras lo llevas puesto. El incrustación acolchado que ya está fijado en el interior del casco suele ser suficiente. Para crear más espacio en el casco, se puede quitar el incrustación del yelmo.
