Descripción del producto
Este broche de pájaro longobardo data de finales del siglo V al VI d.C. y está basado en un hallazgo medieval temprano del período merovingio, proveniente de una colección privada. El modelo para este broche de pájaro longobardo era un S-shaped broche de plata dorada con cabezas de pájaro estilizadas en ambos extremos y una fila de incrustaciones de granate en técnica de cloisonné sobre un fondo de gofre. En nuestra réplica, las celdas están incrustadas con esmaltes de vidrio rojo en lugar del cloisonné original de almandina. El broche está disponible en bronce de alta calidad. Las dimensiones del broche de pájaro longobardo son 3,7 x 3,2 cm. En la parte trasera hay un alfiler robusto con una construcción en espiral.
Los broches de pájaro con forma de S con incrustaciones de granate rojo estaban muy extendidos entre los longobardos en la alta Edad Media. Sin embargo, tales broches con forma de S con cabezas de pájaro también eran una parte esencial del vestuario de otros pueblos germánicos como los francos, bávaros y alamanes del siglo V al VII. Los broches de pájaro longobardos del período merovingio son típicos del atuendo germánico de cuatro broches, donde dos broches de S se llevaban uno sobre otro para cerrar el escote del vestido interior de un traje femenino.
Los broches de pájaro germánicos a menudo tenían incrustaciones en la técnica de cloisonné. Pequeñas piezas de vaso o piedras preciosas (almandinas) se colocan en una estructura de celda de metal previamente aplicada sobre una hoja de gofre de papel de oro o plata dorado y se fijan doblando los barrotes de la celda.
Los símbolos de cuervos probablemente se asocian con inteligencia, táctica, conocimiento, magia y capacidad de previsión. Mientras que el lobo representa más astucia, agresión y fuerza, el cuervo representa más reflexión, agudeza y la búsqueda cuidadosa de objetivos. Ambos enfatizan la cultura germánica y vikinga de dos maneras diferentes. Ambos se unen en el dios Odín/Wodan cuya función es vigilar el orden cósmico.
