Descripción del producto
Descubre esta Túnica vikinga hecha de 100% algodón de alta calidad, adornada con decoraciones bordadas a mano en el estilo artístico histórico Urnes vikingo. El resistente algodón proporciona una apariencia rústica y garantiza durabilidad y una larga vida útil de la sayo. El material transpirable garantiza un confort óptimo y es fácil de mantener. Un elemento central de esta sayo es el intrincado bordado a mano en el estilo histórico Urnes, que adorna la línea del cuello y los extremos de las mangas. El estilo Urnes, originario de la Noruega del siglo XI, es conocido por sus motivos animales curvados e interconectados y refleja la diversidad artística de la era vikinga. Las aberturas de aproximadamente 10 cm en ambos lados de la sayo no solo proporcionan libertad de movimiento adicional, sino también una elegancia estilizada. Esta Túnica vikinga es perfecta para eventos históricos, LARP, festivales históricos o simplemente para los entusiastas de la fascinante cultura vikinga.
Los dragones eran la variante mítica de la serpiente y fueron incorporados en los mitos más tempranos de la humanidad moderna. Con la expansión de la humanidad, la mitología de los dragones también se extendió por todo el mundo. En muchas culturas indoeuropeas, los dragones juegan un papel prominente en sus mitologías. En la mitología germánica y posteriormente vikinga, los dragones son vistos como monstruos destructivos. Al mismo tiempo, simbolizan la bestia maligna que un héroe debe vencer. Estos dos arquetipos, el destructor y el oponente del héroe, se refuerzan mutuamente.
En las culturas indoeuropeas, el lobo tenía un significado dual. El animal era un enemigo peligroso, pero también era respetado por su astucia, fuerza y furia. Esta relación llevó a rituales en los que el lobo era central. El ritual koryos es una expresión importante de este culto al lobo. De aquí se desarrollaron los Ulfheðnar germánicos, guerreros que adoraban a Odín (Wodan) y eran conocidos como los “lobos de Odín.” En el arte germánico y nórdico antiguo, los lobos simbolizaban lealtad, protección, agresión y perspicacia estratégica.
