Descripción del producto
Los celtas tenían al jabalí en alto alta estima, especialmente por su valentía y fuerza en la batalla. Crearon numerosas figurillas que representaban jabalíes, de las cuales se han descubierto más de 100 ejemplares diferentes hasta ahora. El modelo histórico para este colgante celta de jabalí se basa en una pieza de la cultura de La Tène, encontrada en el oppidum de Bibracte, la capital de la tribu gala Haedu. Este lugar fue de importancia histórica para los celtas, ya que fue el sitio de la Batalla de Bibracte en 58 a.C., donde Julio César y sus legiones romanas derrotaron al ejército celta bajo el mando de Vercingétorix.
El colgante mide 3 x 2 x 0,6 cm. También puede servir como un objeto devocional en un altar, representando por sí solo la reverencia celta por el jabalí. Esta pieza está disponible en bronce de alta calidad.
El papel del jabalí como un símbolo venerado de caza y valentía en la batalla se destaca en varias figurillas celtas, hojas de espada y cascos. La representación del jabalí evolucionó de figuras salvajes y agresivas a representaciones más domesticadas. Estas figurillas, que datan del siglo III al I a.C., muestran la importancia del jabalí en la cultura celta. El origen de estas figuras de jabalí se puede rastrear hasta el arte etrusco, donde la postura agresiva y la prominente cresta dorsal del jabalí aparecieron por primera vez en el tipo Bibracte-Luncani.
